CAMPO DE MARIPOSAS
Tu cuerpo inaprensible
etéreo y frágil como un montón
de hojas otoñales.
Desprendida de tí,
de tus raíces,
del valle que inundaba tus venas;
reconocible sello de tus ojos verdes.
Dolor como un prendido,
como un dije
que en el pecho se colgara.
Vacío de tí;
de tu menudo cuerpo de mariposa...
A Alicia
domingo, 16 de agosto de 2009
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Madre mía, qué bonito. La has descrito de una forma preciosa.
ResponderEliminarMuchos besos.